Las Palmas de Gran Canaria.- El Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha solicitado este martes, a través de sus concejales Ángel Sabroso y la portavoz Pepa Luzardo, actuaciones “urgentes y sostenidas” en el tiempo para atajar el incremento de la conflictividad y el deterioro de la seguridad en el barrio de Arenales.
Sabroso, en el transcurso de un encuentro con medios en la misma calle Molino de Viento, explicó que el “día a día” de los vecinos de las calles Molino de Viento, Pamochamoso, Ángel Guimerá o Carvajal consiste en “escándalos, reyertas, ventas de drogas y aumento de las ‘narco-casas’”, por lo que una de las prioridades del próximo grupo de gobierno debe ser “recuperar el orden en la ciudad”.
En primer lugar, el concejal popular demandó dentro de las medidas para atajar este problema, poner en marcha “con carácter inmediato” un plan de vigilancia y refuerzo de la seguridad permanente y estable en el tiempo, basado en la coordinación entre la Policía Local y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE).
Asimismo calificó de “urgente” reactivar las cámaras de video-vigilancia de seguridad que existen en este barrio, concretamente las dos cámaras situadas en la calle Molino de Viento, “y que llevan años apagadas, a lo que unió una segunda medida basada en el campo urbanístico y de actividades clasificadas.
“Hace falta hacer valer el Reglamento de Actividades Clasificadas por el cual se establecen las condiciones necesarias para la obtención de licencia en un establecimiento de naturaleza sexual”, enfatizó Sabroso. “El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, como también lo sabe todo el mundo, es consciente de que aquí se ejercita la prostitución en algunos inmuebles y eso está sujeto a obtención de licencia”, recordó.
Desde el PP indican que llevan meses presentando escritos al departamento de Actividades Clasificadas para saber la situación de estos inmuebles donde se ejercita la prostitución y muchos de ellos a la venta de droga. “No solo no tienen licencia, sino que alguno tiene una autorización, ya vencida, de taller de vehículos o sencillamente no tienen nada”.
Un tercer plano para lucha contra esta situación, a juicio del PP, consiste en el desarrollo urbanístico del barrio, que se basa en una previsión de incremento de alturas, “para hacer desaparecer las casas terreras, pensado para eliminar los puntos donde se ejerce la prostitución”.
“Si esto no se potencia y prioriza este problema se va a eternizar en el tiempo”, lamentó Sabroso, quien en un cuarto plano citó la necesidad de dar apoyo social a los proyectos en Arenales que están muy arraigados en el barrio y que dan apoyo a personas que están trabajando en un contexto de prostitución, “lo que representa una lacra y un drama social”, añadió.
Por su parte, la portavoz Pepa Luzardo indicó que llevamos dos años “trabajándolo y advirtiéndolo de puertas adentro”, en referencia a la degradación de la situación en Arenales, “y ahora ya tomamos la iniciativa y lo que estamos haciendo es explicarlo de puertas afuera”. Luzardo recordó el “pánico” que viven algunos vecinos, sobre todo aquellos con hijos menores. “No tienen seguridad para entrar y salir de sus casas en el barrio de Arenales. Les hemos defendido, hoy les estamos defendiendo y lo seguiremos haciendo”, finalizó.
