Santa Cruz de Tenerife.- El alcalde de la ciudad, José Manuel Bermúdez, acompañado por el concejal de Fiestas, Alfonso Cabello, anunciaron esta mañana que la próxima edición del Carnaval no se celebrará en el formato habitual, sino adaptado a la realidad que se vive como consecuencia de la pandemia. Bermúdez comenzó diciendo que “nadie entendería la celebración de un Carnaval sin nuestra gente en la calle pero desgraciadamente vivimos dos urgencias en la actualidad, que no estarán resueltas del todo en febrero de 2021, por un lado, la crisis sanitaria y, por otro, la crisis socioeconómica que es la consecuencia de la pandemia”.
“No se dan las circunstancias sanitarias adecuadas –prosiguió- para celebrar nuestro Carnaval como lo hemos celebrado siempre, sin nuestra gente en la calle, que es la fuerza que tiene nuestro Carnaval, como lo hemos celebrado siempre y en el formato que estamos acostumbrados desde hace 60 años”.
“No podemos celebrarlo de la misma manera en que lo hemos celebrado siempre, con miles de personas de aquí y de fuera de aquí, disfrutándolo en la calle, que es la fuerza principal que tiene nuestro Carnaval. El Carnaval es una fiesta de Interés Turístico Internacional, que tiene unas raíces muy profundas incluso antes del 1961”, añadió Bermúdez.
El alcalde recalcó que “esta decisión no ha sido fácil de adoptar, pero obedece a dos razones, como son la persistencia de la crisis sanitaria del coronavirus y, en segundo lugar, la necesidad de preservar la protección de la ciudadanía en una celebración eminentemente callejera, multitudinaria y segura”. Bermúdez añadió que “no será este el equipo de Gobierno que organice un carnaval en plena crisis sanitaria, ya que, desgraciadamente, las incertidumbres siguen siendo hoy más numerosas que las certezas respecto a la vuelta real a la normalidad”.
El regidor santacrucero prosiguió diciendo que “ante un escenario todavía tan imprevisible, no se dan las condiciones adecuadas para acometer cualquier preparativo dada la compleja organización del Carnaval en el formato en el que lo conocemos. El Carnaval lo hace el pueblo, pero requiere de una compleja organización”.
De este modo, recordó que “el Carnaval de Santa Cruz de Tenerife se suma así a otras grandes citas festivas que han visto suspendida su celebración, como han sido la Feria de Abril en Sevilla, las Fallas en Valencia o los Sanfermines en Pamplona, por citar solamente algunas de las más importantes del calendario festivo de nuestro país, pero prácticamente las fiestas se han suspendido en su totalidad”.
En dicha comparecencia, el alcalde aseguró que “les anuncio, una vez dicho esto, que estamos trabajando en el diseño de actividades que, de manera no presencial, puedan mantener y recordar el espíritu de nuestro Carnaval entre la población durante las semanas en las que se tendría que celebrar”, con el objetivo de que “estas actividades nos permitirían mantener la llama viva de la fiesta más importante de la ciudad y recordarnos que seguimos teniendo el mejor Carnaval del mundo”.
En cuanto a las consecuencias socio económicas que significarán para la sociedad, José Manuel Bermúdez afirmó que “somos conscientes de lo que supone una decisión de este tipo para las decenas de agrupaciones y colectivos que hacen grande nuestro Carnaval, igual que para nuestro tejido económico y empresarial, con un impacto calculado para la ciudad de unos 30 millones de euros”, y en esa línea señaló con rotundidad que “este grupo de Gobierno tiene claras sus prioridades: atender las necesidades de carácter social y contribuir a la recuperación económica”.
Respecto a esto último, el alcalde anunció que “vamos a mantener la colaboración económica con las agrupaciones del Carnaval, que son el mayor movimiento asociativo del municipio, y con la industria paralela a esta celebración”.
En este sentido, también anunció que “he dado las instrucciones pertinentes para que aprovechemos la ilusión, el talento y la imaginación de la que han hecho gala históricamente las agrupaciones del Carnaval y su industria adyacente en la recuperación de la ciudad para generar ideas que nos hagan mantener viva la llama del Carnaval, por lo que estamos ya trabajando en la determinación de una serie de medidas que ayuden a compensar sus consecuencias”.
Bermúdez quiso recordar que “todas las medidas sanitarias que nos llegan desde las autoridades parten del distanciamiento social, pero nuestro Carnaval no está hecho para eso. Nuestro Carnaval es el del acercamiento social. Está hecho para la gente en la calle, de las miles de personas disfrutando en la calle. Y eso ahora mismo con la pandemia es imposible de realizar y de organizar para garantizar las seguridad sanitaria de las personas que viven en Santa Cruz y para los que visitan nuestra ciudad en esas fechas”.
Bermúdez insistió que “hay que mantener el tejido asociativo del Carnaval, no se puede perder porque se suspenda un año. Hay que mantenerlo vivo. Ya llegará el momento donde volveremos a la calle cuando se supere esta pandemia, y en ese momento los grupos tienen que estar más vivos que nunca”.
Por su parte, el concejal de Fiestas, Alfonso Cabello, comenzó diciendo que “como ha dicho el alcalde no habrá Carnaval, pero el Carnaval será fundamental para la recuperación de la crisis socioeconómica de la ciudad cuando consigamos salir de la pandemia en la que nos encontramos”.
Cabello prosiguió diciendo que “para el Ayuntamiento no es fácil ya que no se dan las circunstancias sanitarias, sociales ni económicas para la celebración en el próximo mes de febrero celebrar el Carnaval en el formato tradicional, esta enorme incertidumbre que todavía hoy existe hace que esta decisión sea inaplazable por la magnitud de esta fiesta, en la que los preparativos, tanto administrativos por parte de este Ayuntamiento, como logísticos, por parte de los grupos, deben empezar varios meses antes”.
El edil indicó que ante esta situación que “desde hace varias semanas hemos mantenido encuentros con los diferentes grupos vinculados a esta fiesta, con los representantes de la industria que mueve esta celebración, para hacerles partícipes del proyecto que estamos trabajando y para que sean ellos, con sus aportaciones, los que lo enriquezcan”.
Este formato para el Carnaval 2021 tiene dos vertientes, según explicó Cabello, “por un lado, convertir una fiesta multitudinaria en una serie de actividades no presenciales que nos permitan mantener esa ilusión entre la ciudadanía. Por otro, convertir a los grupos del Carnaval y esa industria paralela en partícipes en el proceso de recuperación de la ciudad, en punta de lanza de cuantas actividades se organicen para promover que la normalidad económica y social de la ciudad vuelva a ser la de antes, y lo antes posible”.
Asimismo, el concejal de Fiestas señaló que “el encargo por parte del alcalde es claro, primero es mantener el tejido asociativo con las ayudas a los 90 grupos y más de cinco mil personas que los conforman, y, al mismo tiempo, adelantar que vamos hacer extensiva esas ayudas también a los diseñadores del Carnaval, que son los únicos que tradicionalmente no las tienen por parte de la organización siendo uno de los colectivos más importantes del Carnaval”.
El responsable de Fiestas, además, manifestó que “el otro objetivo es estar preparados para cuando se den las condiciones sanitarias adecuadas utilizar el Carnaval como elemento de dinamización y recuperación para mitigar en el menor plazo posible el impacto económico de la crisis que nos ha tocado vivir y así apoyar el tejido industrial, por lo que el Carnaval será clave en la recuperación económica de la ciudad cuando se supere la pandemia”.
Por último, Alfonso Cabello adelantó en cuanto a medidas que se van a llevar a cabo en las fechas tradicionales del Carnaval “una gala que sirva de homenaje a la ciudad de Santa Cruz y una serie de acciones para mantener el Carnaval en el ámbito audiovisual, para lo que hacemos un llamamiento para recopilar todo el material posible, con homenajes a los grupos y así general ilusión y motivación en los colectivos”.