Santa Cruz de Tenerife.- El portavoz del Partido Popular en Santa Cruz de Tenerife, Guillermo Díaz Guerra, culpa al Estado de que Canarias se haya convertido en una “cárcel para inmigrantes”, mientras “soportamos, en soledad, la peor crisis migratoria de las últimas décadas”.
Los Populares han puesto de manifiesto de esta forma su malestar con la decisión del ejecutivo central, amparado por el Gobierno de Canarias y su “silencio cómplice”, de habilitar el acuartelamiento de Las Raíces para la acogida de 2.000 inmigrantes ilegales que ahora mismo están en Gran Canaria.
“Con decisiones de este tipo -advierte Díaz Guerra- lo que ocurrirá es que Canarias se convertirá en una cárcel para miles de personas, cuya intención original no era quedarse aquí, sino continuar su viaje hacia Europa”. Sin embargo, “la mala aplicación de la Ley de Extranjería en Canarias, hace que nuestras Islas sean un embudo, donde además no existen recursos suficientes ni para atender adecuadamente a los inmigrantes que llegan ni para evitar los conflictos sociales que ya hemos empezado a ver en Gran Canaria”.
Al anuncio de que se van a trasladar 2.000 inmigrante a Tenerife, se suma hoy la noticia de que ha habido un brote de coronavirus en el centro de atención de inmigrantes de Hoya Fría, cuando se nos había asegurado que todos los inmigrantes habían sometidos a pruebas PCR. Desde el Partido Popular de Santa Cruz, “exigimos las máximas garantías sanitarias para evitar la difusión de la enfermedad con un confinamiento adecuado, tal y como establecen las medidas sanitarias de obligado cumplimiento para todos debido a la pandemia”.
Díaz Guerra recuerda que “desde que se cerró la ruta mediterránea, la ruta atlántica, con Canarias como primera puerta de entrada a Europa para la inmigración ilegal, se ha incrementado más de un 700%, mientras el gobierno del Estado mira hacia otro lado a pesar de que la inmigración es su competencia exclusiva, y desde las instituciones canarias tenemos que hacer frente a las consecuencias de lo que obviamente es en la actualidad un drama humanitario, que podría convertirse, a la vista de lo que está ocurriendo en Gran Canaria, en un elemento de conflicto social”. Agrega el portavoz de los Populares santacruceros que “no sabemos cuánto tiempo estarán en nuestra tierra estas personas o si deambularán por las calles de nuestra ciudad una vez finalizada la retención. La solución debe ser atenderlos con dignidad, pero después, repatriación o traslado al continente”, concluye.
