Santa Cruz de Tenerife.- El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife prevé que los Centros de Educación Infantil y Primaria (CEIP) del municipio consigan ahorrar un 61% de su consumo eléctrico, a través de la instalación de placas de energía fotovoltaica, «una iniciativa que ha logrado financiación de los fondos europeos Next Generation y que dispondrá de una subvención para la instalación de sistemas sostenibles para reducir la huella de carbono de los centros escolares», anuncia el alcalde, José Manuel Bermúdez, que detalla que «se dispondrá de una ayuda de 309.995 euros, para unan inversión total prevista de 679.937,62 euros».
Bermúdez pone en valor que «no se trata de una acción aislada, sino que se encuentra inserta dentro de la estrategia global del municipio para disminuir su huella de carbono, incluida también en el Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible (PACES)» y recuerda otras iniciativas como «las zonas de bajas emisiones (ZBE), de la que ya está operativa la Zona Urban, con exclusión de tráfico rodado, salvo residentes y carga y descarga; la apuesta por el transporte público 100% eléctrico, con la inversión en 11 guaguas para líneas urbanas, además de sus puntos de recarga eficiente y sostenibles, entre otros».
«Además –insiste el alcalde- es preciso recordar que este Ayuntamiento se adhirió al Pacto de las Alcaldías en 2013, con el compromiso de reducir sus emisiones de CO2 en un 20% en 2020, objetivo que se consiguió» y añade que «sin embargo, en el pleno de abril del pasado año se decidió ampliar este objetivo cumplido con la adhesión al Pacto Europeo de los Alcaldes para el Clima y la Energía Sostenible, fijando una nueva meta que busca continuar con la reducción de emisiones de CO2 en su territorio en un 40% hasta 2030, en particular a través de la mejora de la eficiencia energética y un mayor uso de energía renovables».
Por su parte, Juan José Martínez, responsable de los proyectos estratégicos del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, anuncia que «la aprobación provisional de la concesión de esta subvención se incluye en el marco normativo de la consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial, por la que se convocan ayudas para el período 2021-2023» y recuerda que «el Real Decreto regula los programas de incentivos ligados al autoconsumo y almacenamiento, con fuentes de energía renovable, así como a la implantación de sistemas térmicos renovables en el sector residencial».
«En el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia –detalla Martínez-, el Ayuntamiento presentó la solicitud de ayuda para 34 Centros de Educación de Infantil y Primaria (CEIP) de la ciudad, con el objetivo de cumplir los objetivos climáticos del municipio» y avanza que «se prevé instalar una potencia total renovable en los techos de estos colegios públicos de 405,98 kWp, lo que permitirá la producción 720.806 kWh de energía al año, lo que representaría el 61% del total de la energía usada en estos centros» y finaliza poniendo de manifiesto que «el plazo de ejecución finaliza a los 18 meses de la concesión definitiva».
Martínez concluye afirmando que «también dispondrá de instalación de energía limpia el CEIP San Fernando, único colegio que se iba a quedar fuera, ya que fue remodelada su cubierta recientemente, y no permitía esta iniciativa» y agrega que «pero cuando esté consolidada su estructura, el Ayuntamiento afrontará el gasto necesario para que esté en las mismas condiciones de sostenibilidad energética que el resto de centros educativos públicos del municipio».
Claudia Reverón, concejal de Educación, puso de manifiesto que «el contacto permanente con la comunidad escolar ha permitido un diálogo fluido para sondear la alta sensibilidad con los temas relacionados con el consumo energético responsable» y agrega que «en la inmensa mayoría de los colegios, la disponibilidad para adoptar medidas que colaboren en el ahorro energético es total, lo que siempre es una excelente noticia que fomenta que sean los menores los destinatarios de un nuevo modelo de consumo y los convierte en embajadores que lleven a sus casas la necesidad del cuidado medioambiental».
