Aguere acoge bocetos de la obra del dibujante Paco Roca sobre la memoria histórica, una de los más vendidas y galardonadas desde que se publicó en 2023
San Cristóbal de La Laguna. Desde hace una semana, el Antiguo Convento de Santo Domingo en La Laguna acoge una exposición organizada por la Fundación Canaria Cine+Cómics, cuyo principal atractivo es reunir una treintena de dibujos originales elaborados como base a la obra llamada El abismo del olvido. El álbum surge de la mano del dibujante Paco Roca y el guión del periodista Rodrigo Terrasa y ha sido elegida casi por unanimidad como la más destacada del año pasado en el mundo de las viñetas en España. Desde que salió a la calle a finales de 2023, ha logrado la inusual y casi inalcanzable cifra de 40.000 ejemplares y recibido varios galardones. La publicación es el resultado de una investigación de los autores sobre la represión franquista y el fusilamiento y entierro en fosas comunes de aquellos que se oponían a la dictadura y lucharon en el bando republicano durante la Guerra Civil.
El abismo del olvido relata la triste historia que ha sido el germen de la Ley de Memoria Histórica, cuya ejecución está resultando especialmente ajetreada y que en más de una ocasión ha acabado en los juzgados. La intención no es otra que borrar vestigios de la dictadura franquista, contar lo que realmente ocurrió, evitar que se repita la historia y, por ejemplo, encontrar las fosas a donde fueron a parar los represaliados y que, casi un siglo después, siguen sin estar localizadas. Los bocetos exhibidos suponen una oportunidad única para adentrarse en los entresijos de esta obra y de esta tragedia desde su propio origen.
Para dejar clara la importancia de la exposición y su temática, en el acto de inauguración, que tuvo lugar el pasado 22 de marzo, se contó con la presencia del alcalde de La Laguna, Luis Yeray Gutiérrez, el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo y el ministro de Memoria Democrática, Ángel Luis Víctor Torres. También estuvieron presentes el presidente de la Fundación, Francisco Pomares, el de la Sectorial del Cómic, Alejandro Casasola, que aquella misma tarde presentó el Libro Blanco y Manuel Darias, experto en tebeos a quien hacía pocos días se le concedió la Medalla de Oro de Santa Cruz.
Roca no pudo acudir, pero intervino por videoconferencia para indicar que, desgraciadamente, la temática del álbum, en cuanto a lo referente a las fosas comunes en las que se agolpaban los cuerpos de los fusilados, sigue siendo cuestión de actualidad y de enfrentamiento. Los dos autores pudieron hablar con familias de algunos de aquellos represaliados y la sensación que extrajeron de estos encuentros, según Roca fue de “vergüenza por el ruido político que existe aún con argumentos vacíos que intentan oponerse a que mujeres recuperen los huesos de sus seres queridos”.
Para el dibujante, se está ante una cuestión humana de personas que reclaman un entierro digno para sus familiares y contar con un lugar al que poder ir a llorar, rezar y llevar flores a sus fallecidos. Relató casos concretos como el de Pepica Celda, quien cumplió la promesa hecha a su madre antes de morir de que encontraría los restos de su padre y los pondría en su misma tumba. O también el de un republicano llamado Leoncio Baldía, de la localidad de Paterna, cuya hija relató como fue obligado a enterrar a 2.500 personas, pero que dentro de la tragedia tuvo el gesto humano de recoger recuerdos de todos ellos y hacérselos llegar a sus familiares. “Él intentó mitigar el dolor y guardaba retales de ropa, mechones de pelo o cualquier detalle y dárselos a sus seres queridos, lo que supuso no sólo un acto heroico, sino también de gran dignidad”, dijo Roca.
El presidente del Gobierno canario, Fernando Clavijo, resaltó lo inhabitual que resulta organizar una muestra de cómics, menos aún de una temática como ésta, por lo que alabó la iniciativa de la Fundación de utilizar con este fin un medio que fue el inocente inicio de muchos niños en el mundo de la lectura. Para Clavijo, los tebeos suponen un canal “muy válido” para hacer llegar a los más pequeños y a los mayores asuntos no sólo de diversión, sino también de otras temáticas, como es el caso de la muestra.
El alcalde de La Laguna afirmó que esta exposición abre sus puertas en un momento ideal, porque «vivimos tiempos convulsos y debemos sacar a la luz lo que ocurrió en el pasado para no cometer los mismos errores en el futuro”. Gutiérrez se mostró orgulloso de que se haya elegido la ciudad para acoger la muestra y anunció que la línea de colaboración con la Fundación seguirá en las próximas semanas con la celebración del Feria Internacional del Manga y el Tebeo del municipio.
El ministro, por su parte, subrayó la coincidencia de la cita con otras iniciativas que van en el mismo sentido. Víctor Torres anunció que, pocos días antes, hubo una comparecencia en el Congreso para explicar la aplicación de la ley en esta legislatura, y que también se intentará resarcir a las víctimas del pueblo gitano entre los años 1978 y 1983, haciendo un inventario de los bienes expoliados. Adelantó la creación de un Museo dedicado a explicar lo ocurrido durante la guerra civil, los fusilamientos, represiones y efectos que la dictadura tuvo a lo largo de su casi medio siglo.
“Debemos hacer lo posible para que las nuevas generaciones se den cuenta de lo importante que es recuperar la memoria, conocer la verdad de lo ocurrido para que no se vuelva a repetir. La historia no se puede cambiar, está ahí, nadie puede negar que hubo una guerra civil y que transcurrieron cuatro décadas sin libertades. Ni tampoco la existencia de campos de concentración en el que estuvieron miles de personas porque eran de una raza que un genocida pensaba que era inferior a la suya”, dijo en referencia a Aldolph Hitler.
Para el ministro, “ojalá nunca se hubiesen producido estos hechos y por eso la Ley no busca intentar convencer a las actuales generaciones sino concienciar de que lo más valioso que tenemos es la democracia, que nuestro deber es protegerla y que la violencia nunca debe ser el camino”. Tuvo palabras de recuerdo para una grancanaria llamada Pino Sosa, que fue capaz de encontrar fosos con restos de represaliados cuya desaparición se atribuyó a que habían abandonado a sus familias. O a la hija del anarquista canario, Miguel Campos, que luchó para liberar París y de quien se perdió el rastro. “Ante todo esto, nuestra obligación es intentar convencer a los que quieren derogar la ley o no le dan importancia de que deben cambiar de forma de pensar”, dijo.
Pomares informó de que ésta es la primera de una veintena de exposiciones que la Fundación Cine+Cómics organizará en La Laguna en los próximos meses. Tal y como señaló el alcalde, entre el 25 y 28 de abril se desarrollará en la Plaza del Adelantado y sus alrededores la primera edición de la Feria Internacional del Manga y el Tebeo.
La exposición puede ser visitada de lunes a viernes de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 horas, y coincide con el 17 de marzo, Día del Cómic, una efeméride que es posible gracias al trabajo que la Sectorial del Cómic, encabezada por Alejandro Casasola, ha hecho por reivindicar la importancia que tiene el tebeo ante el Ministerio de Cultura. La muestra de originales supone el regreso de Paco Roca a Tenerife, tras ser uno de los invitados destacados en la pasada edición del Salón Internacional del Cómic y la Ilustración de Tenerife y en la reciente edición de Noviembre-Mes del Vino, visitando La Laguna como protagonista de la sección ‘Vinos y Viñetas’.
En el Salón del Cómic, el historietista valenciano contó con una gran exposición en el Museo Municipal de Bellas Artes de la capital tinerfeña en la que fue posible ver por primera vez una selección de originales de El abismo del olvido. En la muestra abierta ahora en La Laguna se incluyen bocetos preliminares de páginas de la novela gráfica y varios estudios de personajes hechos durante la elaboración del álbum.
