Román Rodríguez expresa el rechazo frontal a la privatización de las torres de control y demanda la ampliación horaria de la operatividad a las 24 horas.
Las Palmas de Gran Canaria.- El candidato a la Presidencia del Gobierno de Canarias por Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC), Román Rodríguez, en un encuentro hoy con una representación sindical de los controladores aéreos y los profesionales del sector, demandó la participación de las instituciones públicas canarias en la gestión de los aeropuertos como exigencia de autogobierno y desarrollo del Estatuto. Rodríguez expresó además el rechazo frontal a la privatización de las torres de control en el Archipiélago al mismo tiempo que reclamó las 24 horas de operatividad en unas infraestructuras vitales, desde el punto de vista económico y para la cohesión social.
El candidato de NC a la Presidencia del Gobierno explicó las propuestas sectoriales del programa, Un plan de país para vivir y crecer mejor, al representante del sindicato Futura Sindical Aeroportuaria (FSAE) en Fuerteventura y de la Confederación de Sindicatos Profesionales Aéreos (CSPA), Ignacio Revilla. La representante de Alternativa Sindical Aena Enaire (ASAE), Natalia Italiyankina. El coordinador de torres de control de Enaire, por la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), Jonay Mosquera, y del Centro de Control de Canarias de USCA, Jorge Cabrera.
«Vamos a defender» la cogestión de los aeropuertos de Canarias, argumentó Rodríguez al denunciar que «no puede ser» que las ocho infraestructuras, que «nos comunican entre sí y con el resto del mundo», estén en manos de organizaciones externas «que ni conocen ni sienten, ni piensan en Canarias».
El candidato de NC-BC a la Presidencia del Gobierno observó que, en 2019, por los aeropuertos de las islas pasaron 45 millones de viajeros que subirán, según las estimaciones de los técnicos, a 48 millones de pasajeros en 2023.
Siendo Canarias una de las tres comunidades con mayor movimiento de pasajeros del Estado, junto con Madrid y Cataluña, «que no tengamos a nadie de aquí sentado allí es terrible», censuró. «Tenemos que conseguir un mecanismo de participación» de las instituciones canarias en la gestión de los aeródromos, como existe en los puertos, según Román Rodríguez. Esta reivindicación, amparada en el Estatuto de 2018, «la vamos a pelear y poner en primer lugar de nuestra agenda política», remarcó el candidato.
Rodríguez refirió además que son un negocio, cuya cuenta de resultados se oculta. De ahí que apelara a la necesidad de «vigilar» su actividad económica y comercial para evitar que prevalezca sobre el interés general y la seguridad de Canarias. De alguna manera, observó, son las infraestructuras que «mejor» expresan «lo que somos», un Archipiélago. «No se puede tolerar», agregó, que el Estado además «no haya financiado» las ampliaciones de unas instalaciones que se autofinancian.
El canarismo de progreso, alertó, se movilizará «al máximo para evitar» la privatización de las torres de control de los tres aeropuertos que aún están en manos de las autoridades públicas. Se trata de Gran Canaria, Tenerife Norte y Tenerife Sur. Tras recordar que el resto fueron privatizadas entre el 2011 y 2013 y que «vamos a pelear por retrotraer lo que ha pasado» con Lanzarote y Fuerteventura, Román Rodríguez consideró que poner estas instalaciones en manos de privados es «inaceptable» y una «irresponsabilidad» que compromete la seguridad del Archipiélago.
También expuso ante los representantes sindicales la trascendencia de que los aeródromos de Lanzarote, Fuerteventura y Tenerife Norte, que superan casi los siete millones de pasajeros, estén operativos las 24 horas. Cuestionó la existencia de instalaciones de estas características en la península, como el de Santiago de Compostela que, con un millón de pasajeros, tiene un mayor horario operativo. Además de otros que, con solo medio millón de viajeros, también gozan de mejores condiciones que las instalaciones de las islas antes señaladas, cuestionó el también presidente de NC-BC
Lamentó que los gobiernos estatales, sean socialistas o populares, «no comprendan» los asuntos canarios. Román Rodríguez mantuvo que, en la meseta y con independencia del color del Gobierno del Estado, «nuestros asuntos se entienden mal». Solo las fuerzas políticas «sin tutela», la «determinación» del pueblo canario y de sus representantes «pueden hacer corregir» las decisiones de la Administración estatal contrarias a los intereses de la ciudadanía de las islas, defendió el candidato de NC a la Presidencia del Ejecutivo.