Santa Cruz de Tenerife.- Dolores Espinosa, concejala de Unidas Podemos (Izquierda Unida-Podemos-Equo), ha trasladado a la Comisión de Control la preocupación de las personas que residen en la calle de La Rosa y aledañas por el inicio, previsiblemente en los próximos meses, de las obras de remodelación de esta vía, y concretamente por cómo se garantizará la accesibilidad en todo este ámbito no solo a sus hogares sino a los servicios públicos, como centros educativos y sanitarios.
Espinosa pidió la comparecencia del gobierno municipal de Santa Cruz en dicho órgano, que no despejó las incógnitas planteadas, con el argumento de que se resolverá con la empresa a la que finalmente se adjudiquen los trabajos.
«No discutimos que esta obra sea necesaria, pero hay que garantizar que la gente pueda ir a los colegios y al centro de salud, y el paso de bomberos y personas con movilidad de reducida; no podemos permitir que pase como con la calle de Imeldo Sería, que quedó totalmente trancada durante su remodelación», mantuvo la edil de UP en su intervención ante la Comisión de Control.
Advirtió Espinosa que la calle La Rosa «es una vía vertebral para muchas personas» porque en ella se ncuentran el colegio La Rosa, el Hogar Escuela, escuelas infantiles y es el único acceso para el colegio Montessori, a la vez que en la aledaña calle Ruiz de Padrón se ubica un centro de salud al que pesonas con movilidad reducida tienen que acudir en taxi.
La concejala de la confluencia de izquierdas enfatizó esta exigencia ante el gobierno local por la experiencia de obras pasadas en otras zonas del centro chicharrero, «donde hay calles en las que la accesibilidad es prácticamente nula» y ante el temor de que, como ha pasado en otras ocasiones, este tipo de obras dure más de los dos años inicialmente programados en la licitación.
Por ello, lamentó que el gobierno municipal no haya contestado a sus preguntas, lo que mantiene la incertidumbre en la población que se verá afectada por la ejecución de los trabajos.
