Las Palmas de Gran Canaria.- La portavoz del Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Pepa Luzardo, ha denunciado este jueves que sigue sin ser adjudicado el contrato de tarjetas de alimentos, cuyo fin es que las familias del municipio en situación de vulnerabilidad puedan acudir a cualquier supermercado para adquirir productos de primera necesidad -mediante una tarjeta bancaria- como comida, leche o elementos de higiene personal.
“Es inhumano que estemos a mitad de año y un contrato tan importante siga sin haber salido tan siquiera del Servicio de Contratación”, explica la concejal del PP, quien este miércoles visitó en compañía de la también concejal Rosa Viera una entidad de reparto de alimentos de Ciudad Alta, en concreto en la Iglesia de Los Dolores, gestionada por Cáritas.
“Como no está adjudicado este contrato de tarjetas de alimentos y por tanto las familias no pueden disponer de las mismas, las trabajadoras sociales se ven obligadas a elaborar cartas de derivación para poder acudir a este tipo de entidades de reparto”, continúa Luzardo, que sin embargo resalta la paradoja de que “para ser atendido por un trabajador social, por ejemplo en Ciudad Alta, deban transcurrir hasta cuatro meses”.
Esta situación ha sido calificada de “grave” por parte de la portavoz popular en el Ayuntamiento capitalino, Pepa Luzardo, dado que al mismo tiempo que se produce este desabastecimiento de tarjetas alimentarias, el PSOE ha cerrado entidades de reparto del Banco de Alimentos que operaban desde locales de titularidad municipal, como el barrio de Zárate, en el Cono Sur.
Desde el PP lamentan que para otras áreas -como Cultura y Sociedad de Promoción- se tramitan los expedientes “con mucha agilidad”, mientras que en el caso de Servicios Sociales “vemos cómo pasan los meses y las semanas y contratos tan fundamentales como este siguen atascado”.
“No son los únicos problemas que tenemos en Servicios Sociales. Además de la falta de tarjetas de alimentos seguimos sin Servicio de Atención de Calle por las noches, con un incremento preocupante de las personas sin hogar o con la principal instalación social que ha generado este grupo de gobierno en sus casi ocho años largos”, en referencia a la Fábrica de La Isleta, “con únicamente tres trabajadores y sin muebles, o lo que es lo mismo, sin dar el servicio para el que estaba previsto”.
Tampoco se está abonando “un gasto tan básico como el pago del transporte de la comida desde el Banco de Alimentos a las entidades de reparto”, unos 70 euros mensuales en cada caso. Esto sucede mientras “PSOE, Podemos y Nueva Canarias siguen dándose golpes de pecho hablando de las personas, mientras que son los únicos que no ven cómo se ha deteriorado socialmente nuestra capital durante su mandato”, concluye.
