Las entidades sociales denuncian la situación crítica que enfrentan tras tres meses de retraso en el abono de 1,8 millones por parte del Cabildo para la compra de alimentos y productos de primera necesidad
Santa Cruz de Tenerife.- Las organizaciones sociales que reparten alimentos y productos de primera necesidad en Tenerife han denunciado la situación crítica que atraviesan debido a un retraso de tres meses en la entrega de subvenciones por parte del Cabildo insular. Veintiséis entidades, que prestan asistencia de emergencia a familias en situación de vulnerabilidad, llevan desde agosto esperando el abono de 1,8 millones de euros destinados a la compra de alimentos, según ha comunicado el Grupo Socialista en el Cabildo.
El consejero socialista Nauzet Gugliotta ha subrayado que esta demora ha dejado a las entidades en un estado de precariedad extrema, dificultando su labor de asistencia. Además, señaló que no se ha abonado otra ayuda, de 500.000 euros, destinada a la compra de material inventariable necesario para el funcionamiento de estas organizaciones.
La resolución para la subvención destinada a la compra de alimentos fue dictada por la Dirección Insular de Acción Social el 28 de agosto, tras haber sido aprobadas las bases de la convocatoria en abril. Sin embargo, hasta la fecha, los fondos no han sido transferidos, lo que ha puesto en aprietos a estas asociaciones, que desempeñan un papel clave en la atención social en los distintos municipios de la isla.
“Las organizaciones no pueden esperar seis meses para recibir ayuda, las personas a las que atienden tienen necesidades diarias”, ha declarado Gugliotta. “Algunas entidades han tenido que recurrir a créditos personales y avales para seguir operando, ya que sus recursos provienen en gran parte de donaciones”.
El consejero socialista ha cuestionado la gestión del gobierno de Rosa Dávila, acusando a la actual administración de haber abandonado a estas organizaciones que actúan como aliadas del sistema de servicios sociales. Según Gugliotta, en el mandato anterior, con Pedro Martín al frente del Cabildo, las ayudas fueron tramitadas con celeridad, lo que permitió que las entidades pudieran seguir funcionando sin contratiempos.
“Las entidades sociales no están pidiendo beneficencia, sino que están colaborando con los poderes públicos para luchar contra la exclusión”, ha añadido Gugliotta. “La situación que enfrentamos actualmente es un claro retroceso en el compromiso que el Cabildo había asumido el año pasado para apoyarlas”.
El Grupo Socialista ha solicitado explicaciones al gobierno insular sobre estos retrasos y ha anunciado que la cuestión será debatida en la próxima comisión plenaria, que se celebrará la próxima semana. Según Gugliotta, el cambio en el sistema de distribución de ayudas desde la Unión Europea no debería ser una excusa para dejar de lado a las entidades que complementan la labor de los servicios sociales públicos.
Esta situación ha puesto de manifiesto la necesidad de un apoyo continuo y efectivo para las organizaciones que atienden las crecientes necesidades sociales en Tenerife, especialmente en un contexto donde cada vez más familias dependen de estas ayudas para cubrir sus necesidades básicas.
