Que no hombre, ni «manos negras» ni nada, gente que no piensa lo mismo, no se vuelva loco con eso tampoco. ¿Que los técnicos de patrimonio del Cabildo quieren destruir su bonito pueblo? Pues en fin, no lo creo y creo que miran más bien por el interés general de todos, pero métase con ellos si quiere y a los ciudadanos que vemos cosas y opinamos pues en fin, si es posible déjenos en paz que nadie le ha caído a la pedrada.
Hay informes técnicos, lo ha sacado la prensa ya, recomendando la protección de esas casas que prácticamente es lo que queda en la carretera general porque hay alguna más que también tienen pensado tumbar para rotondas y demás, ese es el panorama y eso está más que visto, pero el espectáculo de este viernes a la carrera sin proyecto de demolición ni nada que se le parezca ¡hasta los trabajadores municipales sin un triste casco! da que pensar. Su reacción, desde la visceralidad y sin respeto alguno por el que opina distinto y que siempre es un enemigo externo al que hay que declararle la guerra, pues dice mas bien poco de su capacidad de encajar las críticas. ¿Que se cree que desde aquí sacamos este tema como ocurrencia nuestra o porque nos llega por parte de esa minoría de vecinos suyos que no lo ven? En fin, a mi sí que me había llamado la atención la pancarta de la indignidad esa que puso a modo de propaganda, que no hablaba de demolición pero provocaba una mala impresión terrible tristemente confirmada.
Pero esto es lo que hay, más de medio siglo que enterrado el generalísimo y seguimos en la dinámica que al que hable, sin derecho a réplica porque las redes están cerradas al que discrepa, se le despelleja públicamente y soliviantando un poco a las masas pues ya está todo arreglado. «¡No quieren el progreso del pueblo que es lo que yo les traigo!». Era el discurso de Zerolo y mira el hombre cómo acabó su vida política, que por mi y visto lo visto que vuelva mañana mismo.
No, esas casas no eran ningún «escaparate vergonzoso» para el pueblo, eran parte de su patrimonio más valioso que usted, como propietario en nombre del pueblo, ha decidido cargárselo sin consideración a informe técnico de ningún tipo. Ni el posible mal estado de conservación, reversible en todo caso, ni el planeamiento urbanístico son razones (sentencias del supremo hay al respecto) para destruir edificaciones con valor histórico y patrimonial. Ni por aislamiento ni por nada, ya le han pedido los informes técnicos que no aparecen (ni se molesta en contestar) y por ahí deberían ir los tiros en lugar de por la descalificación y el desprecio al que opina diferente. ¡Hombre por dios!
jjafonso.