El compromiso de escribir cada día de un año cualquiera de nuestras vidas, motiva tener la mente ejercitada y preparada para poder seguir transmitiendo a través de la escritura lo que sucede en la actualidad en el mundo. Un mundo, que insiste seguir siendo desigual e injusto, donde el poder del ser humano sigue siendo destructivo con el medio ambiente y en su lucha en las conquistas de las fronteras a través de las guerras bacteriológicas y de armamentos que siguen siendo negocios para muchos países del mundo. Del mismo modo, Ucrania sigue siendo el “matadero” de miles de personas de una guerra cuyo invasor es Rusia, liderado de momento por Putin, parece no dar marcha atrás en su paranoia en destruir un país abierto a la democracia y la paz. Sin duda, la reciente cumbre Alianza Atlántica OTAN llevada a cabo en Madrid, resultó ser todo un éxito, pero especialmente para que Rusia o las fuerzas militares que lidera Vladímir Vladímirovich Putin, observen que Ucrania no está sola. Es decir, Europa está más reforzada y unida que nunca.
Por otro lado, y como escribía al principio del presente artículo refiriéndome a lo personal, lo importante es que mi mente sigue estando activa y con ganas de seguir colaborando con el mundo a través del poder la escritura. Cierto es, que escribir para la opinión pública no es tarea fácil, pero mucho menos contentar a todo el mundo. Y eso es lo bueno, pues de lo contrario si todos pensáramos iguales la escritura convertida en información no tendría sentido ni emoción. Sin duda, vivimos tiempos complejos y difíciles, pero así funciona la vida ser humano en el planeta tierra. Somos lo que somos y no podemos cambiar, pese al intento en hacerlo. El Tercer mundo sigue estando ahí, pero los ojos del mundo occidental parecen no querer abrirlos. Mientras tanto, los contagios por el coronavirus siguen haciendo estragos en la sociedad canaria, aunque con menos intensidad y muertes. Posiblemente las vacunas administradas en su momento motivaron frenar ese virus nacido en un lugar del planeta tierra. Bien a través de un laboratorio humano o por la transmisión de algún animal. Lo cierto es, que de momento las fiestas populares ya han salido nuevamente a las calles del Archipiélago canario. Romerías, Carnavales y verbenas se han convertido en las nuevas baterías de motivación para que el pueblo canario saliese nuevamente a la calle para recuperar su espacio y libertad.
Por último, el cerebro sigue estando activo como si de un volcán en su actividad funcional se tratase. Ejercitar la mente es un compromiso y deber que tenemos que tener muy en cuenta para nuestra salud. Es por ello, poder sentirnos unos privilegiados a la hora de escribir para la opinión pública de lo que acontece actualmente en el mundo.
Rafael Lutzardo. Periodista y escritor.