La Esperanza.- El alcalde de El Rosario, Escolástico Gil, acompañado del concejal de Servicios Hidráulicos, Miguel Ángel Yanes, suscribió en la jornada de ayer, miércoles, el contrato de servicio de vigilancia estructural de las conducciones de desagüe de las aguas pluviales del Municipio. Este nuevo contrato se suma al suscrito el pasado mes de noviembre para controlar los caudales de vertido, la calidad del efluente y el control de las aguas pluviales procedentes de las conducciones de desagüe. Todo ello, con el objetivo avalar el correcto funcionamiento y estado de conservación de los emisarios submarinos del Municipio.
El contrato tiene por finalidad comprobar el estado de los emisarios, cumpliendo la legislación que lo regula, lo que requiere la ejecución de inmersiones subacuáticas para realizar, a la profundidad en la que se encuentra cada una de ellos, el recorrido de inspección de todos sus elementos. De esta forma, se inspeccionará, tanto aquellos tramos que forman parte de la propia conducción, como aquellos otros de protección (dados de hormigón armado), anclajes, lastres anillas de sujeción y especialmente el tramo final donde se insertan los difusores laterales que tienen por misión diluir en la corriente marina el efluente de aguas residuales pretratadas.
El servicio de inspección se prestará anualmente, previo al inicio de la temporada de baño, entre los meses de mayo y junio de cada año en ambas conducciones de Tabaiba y Radazul, que corresponden a los de máximos caudales y cargas de efluentes posibles, comprobándose obligatoriamente el estado estructural de ambos emisarios, sus desagües y aliviadero. Este contrato tiene un coste de ejecución de casi 20.000 euros.
La empresa adjudicataria realizará un exhaustivo chequeo de control que ha sido específicamente preparado para cada conducción, así como los preceptivos informes y reportajes de video submarino.
La prestación de este conjunto de servicios tienen el objetivo de controlar el correcto estado de los emisarios submarinos del Municipio con la finalidad de mantener vigentes las autorizaciones de vertidos de estas conducciones, otorgadas en los años 2003 y 2014 por la Viceconsejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias.