El Tren de Gran Canaria es una infraestructura clave que mejorará el transporte público entre Las Palmas de Gran Canaria y Maspalomas, con una inversión de 166 millones de euros
Las Palmas de Gran Canaria.- El Cabildo de Gran Canaria ha dado inicio al proceso para la expropiación de los terrenos necesarios para la construcción del Tren de Gran Canaria, que unirá Las Palmas de Gran Canaria con Maspalomas. Este proyecto, clave en la transformación del transporte público en la isla, contará con una inversión de 166 millones de euros que serán financiados a través de un crédito extraordinario, aprobado con cargo a los remanentes líquidos de Tesorería.
La financiación, que será destinada a la Autoridad Única del Transporte de Gran Canaria, permitirá ejecutar las expropiaciones necesarias para la realización del ‘Plan Territorial Especial del corredor de transporte público con infraestructura propia y modo guiado entre Las Palmas de Gran Canaria y Maspalomas’ (PTE21). La expropiación será gestionada por Ferrocarriles de Gran Canaria SAU, el ente público encargado de la ejecución, explotación y mantenimiento de la línea ferroviaria.
Este crédito extraordinario responde a la «necesidad inaplazable» de acometer una infraestructura de interés público que, tras la inminente aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), permitirá agilizar las gestiones para garantizar la ocupación de los bienes afectados. El objetivo es evitar retrasos que impidan la financiación y ejecución de las actividades previstas para 2024.
Un proyecto de interés general y sostenible
El Tren de Gran Canaria no solo abordará la congestión actual del tráfico en la isla, sino que también aspira a crear un transporte insular global, eficiente y completamente intermodal. Alineado con las estrategias de movilidad y energía tanto nacionales como europeas, el proyecto se basa en criterios de sostenibilidad social, económica y ambiental. El uso de energías renovables, como un parque eólico de autoconsumo, forma parte de su diseño, que busca maximizar la eficiencia energética.
Además, se espera que el proyecto genere importantes beneficios socioeconómicos, como la reducción de tiempos de desplazamiento y menores niveles de contaminación, ruido y accidentalidad. Los estudios financieros del proyecto apuntan a que, desde su primer año de operación, los ingresos cubrirán los costes de explotación y amortización.
El impacto económico del Tren de Gran Canaria se extiende a diversas áreas de actividad, especialmente en el sector de la construcción, que verá un incremento del 40% en su actividad. Se estima que la inversión total del proyecto generará un impacto económico de 5.578 millones de euros, con una contribución al PIB canario superior al 4% y la creación de más de 25.000 empleos a tiempo completo.
