Las Palmas de Gran Canaria.- El Grupo Popular en el Cabildo de Gran Canaria ha puesto en duda que la crisis institucional, económica y social que arrastra el CB Gran Canaria Claret SAD desde hace varias temporadas se vaya a solucionar con un simple cambio de nombres en la presidencia y vicepresidencia del club e incrementando la presencia de cargos políticos en el organigrama de la entidad.
«La destitución de Enrique Moreno y el nombramiento de Sitapha Savané como nuevo presidente del club no es más que una estrategia de marketing, un golpe de efecto de cara a la galería para intentar camuflar el agujero económico y la situación insostenible de una entidad sumida en el caos desde hace varios años», señalan los populares.
No obstante, el PP quiere felicitar a Sitapha Savané por su nombramiento y desearle suerte en su nueva responsabilidad para intentar construir un proyecto ilusionante que permita enderezar el rumbo de la nave amarilla y alcanzar los objetivos marcados por el club en el plano institucional, económico y deportivo.
Sin cuestionar la capacidad del nuevo presidente para llevar las riendas del CB Gran Canaria, el PP insiste en que los relevos en la cúpula directiva son sólo «medidas cosméticas» para maquillar el deterioro de un club a la deriva que bajo la presidencia de Antonio Morales en el gobierno insular ha ido perdiendo sus señas de identidad y los valores de aquel equipo nacido en la década de los 60 en el patio del Colegio Claret.
En este sentido, el Grupo Popular también ha mostrado su preocupación por la falta de explicaciones sobre las condiciones del contrato del nuevo presidente, salvo que «aún se está negociando» y que el Cabildo pretende «blindar su continuidad» más allá de las elecciones de mayo de 2023 sin consensuar previamente esta decisión con los grupos de la oposición en la Corporación insular.
Además, el PP cuestiona los tiempos elegidos por el gobierno del Cabildo (NC, PSOE y Podemos) para taponar la hemorragia en el seno del club y oficializar los cambios en los puestos directivos, justo después de fichar al nuevo entrenador, renovar al director deportivo y con la plantilla ya confeccionada para la temporada 2022/2023, lo que pone de manifiesto una vez más la desastrosa planificación por parte de los responsables políticos en la institución insular, propietaria del club.
«No basta con un cambio de cromos; es necesario despolitizar la entidad de una vez por todas, acometer un cambio profundo de la estructura y el modelo de gestión, y armar un proyecto de futuro serio, sólido y solvente, que enganche de nuevo a la afición, atraiga a nuevos patrocinadores y devuelva al club al sitio que por historia y presupuesto le corresponde», subraya el PP.
Sin embargo, a tenor de las explicaciones ofrecidas ayer por el presidente insular, Antonio Morales (NC) y el vicepresidente Miguel Ángel Pérez (PSOE), los planes del Cabildo van en sentido contrario. Tanto es así que otro consejero socialista, Juan Díaz, que gestiona el área de Empleo, será quien ocupe el puesto vacante en la vicepresidencia del club tras el cese fulminante del todavía consejero de Deportes Francisco Castellano.
Por otro lado, el PP critica que, al margen del cambio de presidente y vicepresidente, el Cabildo vaya a incrementar la presencia de cargos políticos en la estructura del club con el desembarco de un «equipo de consejeros» -entre los que estarán Miguel Ángel Pérez y el consejero insular de Hacienda, Pedro Justo- que se encargará de llevar las riendas de la gestión económica.
La defenestración del consejero de Deportes
Capítulo aparte merece, a juicio del PP, la defenestración de Francisco Castellano como vicepresidente del club. Su destitución por razones estrictamente políticas después de tres años en el cargo supone «un reconocimiento explícito de la incapacidad y el fracaso del gobierno insular en la gestión de la entidad claretiana durante los últimos años».
A este respecto, los populares lamentan el «bochornoso espectáculo público» por los continuos encontronazos y el pulso entre el anterior presidente amarillo, Enrique Moreno, y Francisco Castellano, aireando en los medios de comunicación sus notorias desavenencias sobre la gestión del club, «una guerra que ha dañado la imagen de la entidad y la reputación de la marca Gran Canaria, influyendo además negativamente en el rendimiento deportivo del equipo».
Así lo reconoció el propio Antonio Morales en el acto de presentación de Sitapha Savané como nuevo presidente del CB Gran Canaria. «Es verdad que se han producido desencuentros políticos que luego se han trasladado a los medios de comunicación y han generado desafecto y rechazo por parte de la afición, y por eso hemos decidido dar un golpe de timón para no seguir dando esta imagen», llegó a decir el presidente del Cabildo tratando de restar importancia al incendio que se ha vivido en los últimos años dentro de la entidad claretiana.