La ONG canaria Educanepal lanza la campaña “por un cacharro de gofio y agua” para ofrecer desayunos a los niños que tiene escolarizados en Nepal

Su fundador, José Díaz, afirma que “con estos desayunos se ha logrado duplicar el número de alumnos escolarizados en las 20 aldeas en las que trabaja Educanepal”

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Canarias.- La ONG canaria Educanepal ha lanzado la campaña “por un cacharro de gofio y agua”, con el objetivo de poder ofrecer desayunos a los menores que tienen escolarizados en el país asiático.

Al respecto, el fundador de la ONG Educanepal, José Díaz, ha afirmado que “esta iniciativa ya se puso en marcha el año pasado en algunos centros, y con ello, se ha logrado duplicar el número de niños y niñas escolarizados, llegando a cerca de 3.000 en las 20 aldeas en las que trabaja Educanepal”.

“Niños que iban al colegio sin haber comido nada y luego desaparecían en el recreo para volver a sus casas con la esperanza de que sus padres hubieran regresado ya de los campos de cultivo para poderles preparar algo de comer”, ha indicado Díaz, quien ha recordado que “sin los materiales escolares que repartimos, sin el desayuno, o sin las visitas mensuales que hacemos a cada aldea sería muy difícil conseguir el objetivo: que los niños no deban abandonar sus aldeas y familias por pobreza o sean engatusados por mafias que se aprovechan de la precariedad y de la ingenuidad de los padres”.

En este sentido, ha añadido que “el objetivo de esta campaña es poder ofrecer este desayuno en todos los centros de Educanepal”, y para ello, “necesitamos la ayuda de todos los canarios, necesitamos socios y padrinos que nos ayuden a seguir cubriendo las necesidades básicas de los más pequeños y de sus familias en Nepal”.

Para ello, quiénes estén interesados pueden hacerse socios por 10 euros al mes aquí: http://educanepal.org/como-colaborar/

Educanepal lleva 19 años intentando prevenir el tráfico y explotación laboral de niños en Nepal.  José Díaz fundó esta organización sin ánimo de lucro tras pasar dos años como voluntario al sur de Katmandú, capital del país.

“Ayudar es acción. Así comenzó todo. Vi a unos niños picando piedras y quise llevarlos a la escuela. Conocí a niñas que habían sido vendidas por 30 euros y me puse manos a la obra para que no se traficara con más niñas en las aldeas de Makwanpur, el distrito donde paso seis meses al año en Nepal”, ha recordado el fundador de Educanepal.

Y ha destacado “la labor que hacen los voluntarios de la ONG tanto en Canarias como en algunos puntos de la Península para conseguir los fondos necesarios para mantener todos nuestros proyectos en Nepal, proyectos que van desde los desayunos escolares, hasta la escolarización de los más pequeños para evitar el tráfico sexual y laboral, pasando por proyectos de empoderamiento de la mujer y programas sanitarios”.