Santa Cruz de Tenerife.- Nueva Canarias (NC) de Tenerife ha pedido hoy el cierre, de “manera inmediata”, de los campamentos de Las Raíces y de Las Canteras, convertidos en “campos de refugiados”, donde se mantienen en condiciones de hacinamiento a las personas migrantes que llegan vía marítima a Canarias.
La organización nacionalista progresista de la isla ha insistido en la clausura inmediata de estas instalaciones por considerar que se vulneran derechos fundamentales. También ha reclamado que se pongan en marcha las derivaciones, para lo que es “fundamental” la solidaridad del resto del Estado y de la Unión Europea.
Los recientes enfrentamientos entre los migrantes de los campamentos, según NC de Tenerife, es una “clara señal que nos indica que no se puede permitir” que estos centros se conviertan en focos de conflictos por la falta de atención médica, de alimentos, de medios humanos, materiales y por el hacinamiento al que son sometidos sistemáticamente en estos recintos.
Los nacionalistas progresistas se han opuesto “frontalmente a que continúe esta dramática” situación, en la que se ha puesto de manifiesto una “clara descoordinación” de los ministerios implicados. Han cuestionado además que aún el Ministerio de José Luís Escrivá no haya respondido a la petición del diputado de NC en el Congreso Pedro Quevedo sobre la “urgencia” de iniciar la redistribución de los migrantes adultos y menores ante el “desbordamiento e insuficiencia” de recursos de atención disponibles en el Archipiélago.
Es “inadmisible que se permita que Canarias sea la frontera sur de Europa y acabe siendo la próxima Lampedusa”, denunciaron. Nueva Canarias de Tenerife ha instado a las instancias administrativas estatales y europeas, con competencias en la materia, a actuar con “urgencia e inmediatez”.
