Santa Cruz de La Palma.- El Cabildo de La Palma ha aprobado por unanimidad el acuerdo institucional sobre el estado de emergencia climática en la Isla, lo que representa un compromiso desde la institución insular para hacer frente a uno de los grandes retos que afronta la humanidad, el cambio climático.
La consejera de Cambio Climático y Servicios, Nieves Rosa Arroyo, destacó la importancia histórica de este acuerdo que debe representar un antes y un después en el compromiso ambiental en todas y cada una de las líneas de actuación que desarrolla la Corporación Insular, como una apuesta transversal en favor de la sostenibilidad.
“La declaración de estado de emergencia climática es una obligación moral y legal por parte de la Corporación Insular para la adopción de decisiones en la línea marcada por la Unión Europea, que conlleva la reducción de emisiones de gases con efecto invernadero, el empleo de energías renovables y medidas de eficiencia para reducir el consumo de energía”, subraya Nieves Rosa Arroyo.
La consejera destaca que la crisis climática es palpable en la isla de La Palma y requiere de la adopción de medidas concretas como las que recoge el acuerdo que ha aprobado el pleno y que han de tener su traducción presupuestaria. “Este acuerdo no es una mera expresión de buenas voluntades, sino un compromiso radical en la defensa y promoción de una lsla más sostenible porque nos va la vida en ello”, añadió.
“Llevamos años de sequía. Y en estos días, sin ir más lejos, hemos padecido el aumento de las temperaturas en pleno invierno, que se traduce en enfermedades. El cambio climático es una realidad y el Cabildo, como está haciendo, debe aportar decisiones políticas, con traducción económica, para tener más agua destinada al consumo vecinal, la agricultura, las industrias, así como anticipar las campañas de prevención contra los incendios forestales, entre otras medidas”.
La consejera indicó que es necesario también tomar medidas para seguir aumentando la sensibilización sobre este reto ambiental, mediante campañas de educación, formación y concienciación de la población. “En La Palma debemos poner todos nuestros esfuerzos en hacer frente a este reto al encontrarnos en un territorio especialmente sensible y vulnerable por su condición insular, su situación geográfica y su biodiversidad”.
Nieves Rosa Arroyo llamó la atención al término de su intervención sobre la necesidad de “empezar este camino por nosotros mismos, modificando nuestros hábitos de vida, para que nuestro ejemplo llegue a todos los rincones de La Palma”.