Santa Cruz de Tenerife.- Jóvenes Nacionalistas de Tenerife critica la improvisación constante en las decisiones que toma el Gobierno en el Ayuntamiento de Santa Cruz, gestión arbitraria que afecta negativamente a la seguridad de los y las chicharreros/as. JNC concreta su asombro en las formas de gestión de la alcaldesa, Patricia Hernández y el concejal de Fiestas, Andrés Casanova, de quienes aseguran que “solo aciertan cuando rectifican, modelo de gestión que responde a que buscan el titular fácil en los medios de comunicación y no una eficiencia en el servicio público”.
JNC centra sus críticas en varios ejemplos recientes como lo ocurrido con la llegada de los Reyes Magos al Heliodoro Rodríguez López el pasado 5 enero: “se les llenó la boca diciendo que el helicóptero que transportaba a sus Majestades iba a aterrizar en el estadio de fútbol, pero la realidad es que el área de Fiestas del ayuntamiento, que organizaba el acto, no tenía todos los permisos para hacerlo”, es por esto que “generaron una falsa expectativa y, para colmo, su fracaso trataron de trasladarlo a una empresa”.
Jóvenes Nacionalistas señala que “con el Carnaval ha pasado lo mismo, buscando los “titulares fáciles”. Al respecto argumentan que “dijeron que venderían 9.000 entradas para la final de murgas, pero ofertaron 7.500 para poder cumplir con la normativa de seguridad. De igual manera -continúan- tuvieron que reducir a 2.000 las 5.000 plazas de pie anunciadas. Parece que priorizan los titulares de prensa a la seguridad de la ciudadanía, además de lanzarse a vender ideas sin antes comprobar que son viables”.
“La última ocurrencia -añaden- fue que el tranvía llegue hasta la parada del Teatro Guimerá durante la celebración del Carnaval, un anuncio que hicieron sin tener en cuenta la seguridad, ni la opinión de los responsables del citado transporte público, ni de la Policía Local. Ahora han tenido que tragarse sus palabras nuevamente, ya que los expertos en seguridad han descartado esa opción”.
Jóvenes de CC aseguran que Hernández y Casanova “actúan desde el desconocimiento, con frivolidad, sin el menor rigor, ni conocimiento de las normativas y con el único afán de vender algo que no es real”. Aseguran que “la ciudadanía ya se ha dado cuenta de que no cumplen lo anunciado y que solo aciertan cuando rectifican”. Ante todo ello: “exigimos un mayor rigor a la hora de tomar decisiones y frente a la improvisación de la alcaldesa y el concejal, debe primar la seguridad”.
