En la tarde de ayer, Inmaculada Medina, mantuvo una reunión informativa con vecinos de La Isleta
Las Palmas de Gran Canaria. La portavoz del Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Jimena Delgado-Taramona, ha denunciado «la continua improvisación que marca la presente edición del Carnaval 2024 de Las Palmas de Gran Canaria».
En la tarde de ayer, la concejal responsable del Carnaval, la socialista Inmaculada Medina, mantuvo una reunión informativa con residentes de La Isleta, «a los que convocó deprisa y corriendo por WhatsApp». «Lejos de aclarar las dudas, según algunos de los vecinos, acrecentó aún más el malestar y la incertidumbre que rodea esta edición de 2024. Realmente, es el Partido Popular el único que está defendiendo el Carnaval».
Delgado-Taramona ha insistido en que «quedan escasos veinte días para que dé comienzo una de las fiestas más importantes para la ciudad, si no la más importante, declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional, como a Medina le encanta recordar; y seguimos viendo que las obras que han empezado deprisa y corriendo, adjudicadas a dedo, están en un estado prematuro para como deberían encontrarse a estas alturas».
La portavoz del Grupo municipal Popular ha subrayado que «los vecinos que se acercaron a escuchar a la responsable del Carnaval no han visto satisfechas sus dudas acerca de los problemas que causará el nuevo emplazamiento de las celebraciones del Carnaval en la movilidad del barrio de la Isleta, sobre todo después de escuchar de boca de Inmaculada Medina, que la GC-1 se cerrará en su acceso a la Plaza de Belén María en los días más importantes», es decir, en la Gala de la Reina, la Gala Drag y la Fase de Murgas, «por citar algunas». Días en los que la asistencia de carnavaleros, turistas y curiosos alcanzan cifras muy altas.
Esto generará graves consecuencias para los conductores y vecinos «será un caos, ya que tendrán que acceder al barrio por el subterráneo de Pérez Muñoz, que da directamente a uno de los núcleos de la fiesta, la Plaza de la Luz, donde se instalará una feria de atracciones que complicará el tránsito de peatones, vehículos y transporte público».
Metroguagua y Dr. José Guerra Navarro
«La falta de concreción y de rigor de este Grupo de Gobierno progresista no tiene parangón. La concejal responsable del Carnaval anunció que el próximo jueves 11 de enero, se culminarán las obras de la Metroguagua en la calle Juan Rejón, a fin de permitir el acceso a la GC-1 por la ahora cerrada calle Dr. José Guerra Navarro». Los populares ponen en duda esta afirmación, además de cuestionar «la prisa que se dan en abrir la calle por el Carnaval, cuando lleva mucho tiempo siendo un problema para la movilidad de la zona. ¿Solo se preocupan de finalizar tramos de la Metroguagua allí donde afecta al Carnaval?» se pregunta Delgado-Taramona.
Sin embargo, «los despropósitos que enfrenta el Carnaval 2024 no quedan ahí. La concejal Medina ha adelantado que se contratarán más de 170 vigilantes de seguridad privada para controlar los diferentes emplazamientos en los que se desarrollarán las fiestas. Esto no hace sino disparar el coste final del que volverá a ser nuevamente, y con total seguridad, el Carnaval más caro de la historia, con un presupuesto que alcanza los 6 millones de euros.»
Este nuevo emplazamiento para el Carnaval 2024, «provocado por las obras de la Metroguagua, que mantienen el Parque de Santa Catalina inoperativo para las fiestas» ha provocado que se haya adjudicado por la vía de urgencia, sin publicidad y en menos de diez días, el contrato para la adecuación de la parcela donde se desarrollarán los actos principales, por un montante de 1,2 millones de euros. «Una instalación efímera que perdurará tan solo durante la celebración de las carnestolendas.»
La portavoz de Grupo municipal popular, Jimena Delgado-Taramona ha insistido en que «el Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria, siendo la fiesta más importante de la ciudad, no se merece que este gobierno municipal lleve ocho años tratándolo como lo está haciendo; sin darle el valor y la importancia que tiene para la ciudad, sin valorar a los grupos del carnaval y sin tener en cuenta los miles de carnavaleros que esperan con ansias estas fechas. Este descontrol está llevando nuestro Carnaval a la deriva, aumentando cada año escandalosamente el presupuesto y una disminución de asistentes que prefieren acudir allí donde sí se toman en serio estas fiestas».
