Madrid.- La diputada de Coalición Canaria, María Fernández, reclamó hoy “medidas de apoyo” para el que señaló “es uno de los sectores más castigados por las sucesivas crisis, primero la sanitaria, posteriormente, la guerra en Ucrania y la provocada por la inflación”. La parlamentaria que defendió medidas específicas para el motor económico de las Islas durante el debate de una Proposición No de Ley de los populares para establecer una estrategia para el sector, aseguró que su realidad “no es la que nos venden invadidos por la fiebre del cercano proceso electoral”.
Fernández evidenció las amenazas del turismo, entre ellas, “las subidas de los tipos de interés, el miedo a un nuevo colapso del sistema financiero que ya auguran algunos expertos, o las propias previsiones de estancamiento de la economía alemana en 2023”. De la misma forma, repasó los datos que arroja el sector “pese a esa imagen idealizada -insistió- del Gobierno de Canarias. La realidad es que en 2022 llegaron 623.000 turistas menos a las Islas que en 2019. Más de la mitad en Gran Canaria, por cierto, evidenciando la pérdida de competitividad de la isla en una coyuntura muy complicada”.
De la misma forma, apuntó que “la realidad es que en diciembre de 2022 se firmaron 7.213 contratos menos en el sector turístico canario que en 2019. Un 23% menos con respecto a la etapa anterior a la pandemia”.
La diputada nacionalista aseguró que en medio de estas cifras “Canarias se ha dejado atrás la oportunidad de aprovechar la coyuntura para impulsar los Planes de Modernización Turística, implicando al Gobierno de España, al Ministerio de Turismo, en la renovación y modernización de las infraestructuras turísticas canarias”.
De la misma forma, emplazó al Gobierno estatal a “pelear en Europa” para que Canarias sea excluida del Sistema de Comercio de Derechos de Emisión que, aseguró, podría “provocar un daño irreparable en un sector que podría perder un millón de turistas, 40.000 puestos de trabajo y que también repercutiría en el bolsillo de los canarios, los que estudian fuera, los que tienen que desplazarse por motivos de trabajo”. La diputada aseguró que de “no quedar excluida se estaría castigando gravemente a una región que no puede elegir otra forma de viajar”, concluyó.
