Santa Cruz de Tenerife.- Los empresarios de la construcción piden soluciones inmediatas y eficaces, ante la inoperatividad de las Oficinas Técnicas Municipales y las Gerencias de Urbanismo, que provoca la paralización del sector y pone en peligro la estabilidad empresarial y el empleo. Oscar Izquierdo, presidente de FEPECO, después de mantener una amplia reunión con una numerosa representación empresarial del sector, ante las dificultades sobrevenidas a las empresas por el estancamiento en el otorgamiento de licencias de obras, en la mayoría de los ayuntamientos, ha declarado que: “El atasco no sólo se produce en nuestras carreteras, sino que también está en la mayoría de los ayuntamientos, incapaces de diligenciar las licencias de obra y los informes, no sólo con la prontitud debida, sino dentro de los plazos reglamentarios, que son sistemáticamente incumplidos”.
La excesiva regulación que se soporta, con normas o legislación incluso contradictoria, que provoca una inflación de procedimientos administrativos, sin adecuada coordinación, hace que el propio sistema demande mayor cantidad de recursos económicos, humanos o técnicos, en general inexistentes o de casi imposible dotación. Es la paradoja de la administración imperfecta, ella misma se llena de procedimientos que son imposibles de gestionar al no reconocer sus propias limitaciones. Se tendría que publicitar los plazos máximos de resolución, que tiene en sus distintos niveles y cuáles serían los trámites para seguir en caso de reclamación, a los que tienen derecho las empresas o los ciudadanos. Se trata de la máxima transparencia, información y pedagogía ciudadana, en cuanto a conocer con claridad derechos y obligaciones, indemnizaciones exigibles, cómo y cuándo se aplica el silencio administrativo o responsabilidades a las que se enfrentan los funcionarios y políticos en caso de incumplimiento o por dejadez de funciones.
Es urgente tomar medidas efectivas, las reformas necesarias deben pasar por mejorar la productividad, comenzando por un sistemático adelgazamiento normativo y simplificación de procedimientos administrativos. Hay muchas disfunciones que se solucionarían con una organización de los medios humanos, materiales y técnicos, acordes a las necesidades de cada departamento o servicio. Y por supuesto, mejorando la coordinación entre las propias administraciones. No se trata de engordar o hacer más grande la administración, porque eso significaría empeorar la situación actual; se trata de racionalizar y dar efectividad a lo que se tiene. El crecimiento de la productividad tiene que venir motivado por una mayor exigencia de responsabilidades.
Oscar Izquierdo invita a “no permanecer inmóvil y buscar soluciones ante la desastrosa situación que se padece en las Oficinas Técnicas Municipales y las Gerencias de Urbanismo, es una irresponsabilidad de los que tienen la obligación de gobernar que, por cierto, es tomar decisiones y que si no se asumen provocará más paro, pérdida de competitividad, deterioro del tejido empresarial y estancamiento de la actividad económica”.