Santa Cruz de Tenerife.- El sindicato mayoritario dentro de las administraciones públicas y de mayor crecimiento dentro de las empresas privadas ha presentado la primera demanda en Canarias y España en contra de la instauración de las llamadas “cajas amigas” en las que son los propios clientes los encargados de gestionar el pago de sus compras.
Desde el sindicato se ha denunciado la forma de proceder de la empresa, que ha transformado de manera notable las funciones diarias de las cajeras, modificando el nombre de su categoría profesional al de asistentes en relación con el cliente sin que la representación legal de los trabajadores en la tienda, hayan visto como la mercantil de bricolaje, negociara con ellos el proceder con respecto a un colectivo que casi supone un tercio del total de empleados de la tienda.
En palabras del abogado del sindicato independiente, Cristo Llurda, “no podemos consentir como sindicato independiente que somos que las empresas de grandes superficies utilicen el derecho a su antojo, mucho menos podemos consentir como sindicato el hacerles un traje a medida a las empresas que generan millones, y aún así, se dedican a formar temporalmente a los trabajadores para adaptar al cliente a que pase por sus cajas automáticas, para posteriormente prescindir de ellos mediante despidos colectivos, lo que supone para colmo que la empresa se ahorre incluso grandes cantidades por los mismos”.
Desde CSIF, se recuerda por último que “ya fuimos los artífices a nivel nacional de conseguir hace dos años que una trabajadora de grandes superficies pudiera ver visto reconocido judicialmente su derecho a conciliar su vida laboral y familiar junto a su hija y su pareja, que además es compañero de trabajo. Basta ya el abuso existente en las grandes superficies”.
