El Ayuntamiento de La Laguna enfrenta una crisis de gobierno tras la dimisión de una concejala y la retirada de competencias a otra, mientras Drago Canarias denuncia el uso partidista de recursos públicos para proteger al alcalde ante una posible moción de censura
San Cristóbal de La Laguna.- El Ayuntamiento de La Laguna atraviesa una significativa crisis de gobierno tras la dimisión de la concejala Leticia Villegas y la retirada de competencias a la concejala Cristina Ledesma, responsable de la seguridad ciudadana. Esta situación ha provocado una serie de críticas por parte de la oposición, señalando la falta de transparencia y la debilidad de la actual administración. El Partido Popular ha sido uno de los principales opositores, acusando al gobierno local de ocultar esta crisis interna y de estar más centrado en resolver sus conflictos internos que en gobernar de manera efectiva.
A pesar de que han transcurrido solo 10 meses desde el inicio del mandato, las tensiones dentro del gobierno municipal formado por PSOE y Coalición Canaria han quedado en evidencia, afectando la gestión de áreas claves como la seguridad ciudadana. Esta situación ha generado incertidumbre sobre la capacidad del gobierno para mantener una dirección clara y ofrecer soluciones a los problemas de La Laguna.
Por su parte, Drago Verdes Canarias ha denunciado la utilización de recursos públicos con fines partidistas por parte del alcalde de La Laguna, Luis Yeray Gutiérrez (PSOE). Según Drago, el reparto de liberaciones entre los grupos de la oposición beneficia de manera desproporcionada al Partido Popular, Unidas Se Puede y Vox, dejando a Drago en una posición desfavorecida a pesar de tener la misma representación electoral que otros partidos. Esta situación, según la formación, refleja una maniobra para proteger al gobierno municipal de una posible moción de censura.
Además, Drago ha solicitado en repetidas ocasiones la reducción del número de liberaciones en la oposición, con el fin de destinar esos recursos al personal técnico que beneficie a la ciudadanía. Sin embargo, hasta el momento, estas peticiones no han sido atendidas, lo que ha generado un clima de descontento y suspicacia en el ámbito político local.
Ambos partidos coinciden en que la situación en el Ayuntamiento de La Laguna es insostenible, lo que podría derivar en una mayor inestabilidad política en el futuro cercano.
