Madrid.- El senador por la Comunidad Autónoma de Canarias, Fernando Clavijo, lamenta la pérdida de 15 millones de euros para infraestructuras turísticas por la decisión del PSOE de impedir que la Diputación Permanente del Senado ratificase los cambios introducidos por el Congreso de los Diputados en el proyecto de ley de Thomas Cook.
El PSOE impuso su mayoría absoluta en la Cámara Alta para impedir que se aprobasen los avances logrados en el Congreso. La caducidad del proyecto de ley provoca su caída en las Cortes Generales y, por tanto, permanece en vigor el Real Decreto aprobado por el Consejo de Ministros, en el que el Gobierno socialista destina los 15 millones para su utilización para paliar los efectos de la crisis de Thomas Cook.
Clavijo señala que “no ha habido voluntad por parte de los socialistas para sacar adelante otros logros alcanzados en el Congreso, alargando los plazos hasta el último día posible para evitar su tramitación. Una decisión premeditada sobre la que tendrán que pronunciarse aquellos que han permitido que Canarias salga perdiendo en una iniciativa que se impulsó para aliviar las pérdidas por el precipitado cierre del operador británico”.
Además de los 15 millones para infraestructuras turísticas, que debían ser abonados antes del 15 de diciembre de 2019, Canarias pierde también la bonificación del 100% del importe de todas las tasas aeroportuarias durante un periodo de 12 meses y del 50% de las cuotas de la Seguridad Social”.
Disminuye, por otro lado, de 500 a 200 millones de euros para atender las necesidades financieras de los afectados por la insolvencia del grupo empresarial Thomas Cook y sus filiales y, además, se cae el apartado nuevo incluido en el Congreso para la aplicación de la quinta libertad del aire en la red de aeropuertos canarios. Una medida “fundamental para consolidar Canarias como un nodo de comunicaciones aéreas entre continentes”.
Clavijo critica que “los socialistas han enterrado los logros acordados por la mayoría de la Diputación Permanente del Congreso en una operación inaudita en la que han jugado con los diputados y senadores dado que desde el minuto uno de la entrada del Real Decreto en las Cortes ya tenían más que tomada la decisión de no permitir ni un solo cambio”.