Las Palmas de Gran Canaria.- El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, y el vicepresidente, Román Rodríguez, presentaron este viernes, en la sede de Presidencia de Las Palmas de Gran Canaria, el plan autonómico de medidas extraordinarias de ayuda a los subsectores de la restauración, la hostelería, el comercio y empresas deportivas más afectadas por las consecuencias de la pandemia COVID-19 y las restricciones sanitarias aplicadas. El programa contempla un total de 400,8 millones de euros, que se suman a los 95,3 millones de aportaciones directas distribuidas desde marzo de 2020 por el Ejecutivo regional al transporte aéreo, marítimo, el sector agrícola, los autónomos, la cultura y otros ámbitos productivos.
Según subrayaron Torres y Rodríguez en una comparecencia conjunta, se trata de la cifra más elevada de todos los planes extraordinarios de las comunidades autónomas españolas para los subsectores más afectados, sobre todo atendiendo a la media estatal analizada y la capacidad económica de Canarias. De esos 400,8 millones, 165 corresponden a ayudas directas a fondo perdido, siempre en función de las afecciones de la pandemia a los distintos negocios. Para ello, se abrirá el correspondiente procedimiento y convocatoria de solicitud, siempre con la meta de la máxima agilización, objetividad y efectividad, pero en cumplimiento de la normativa vigente. En todo caso, el Ejecutivo se muestra convencido de que este paquete de ayudas directas estará en marcha durante este primer trimestre.
Los otros 235,8 millones corresponden al aplazamiento del Impuesto General Indirecto Canario (IGIC) del primer trimestre de 2021 (un total de 195 millones) y de deudas fiscales durante seis meses, lo que se prevé aprobar en el Consejo de Gobierno del próximo jueves, entrando en vigor desde su publicación en el Boletín Oficial de Canarias (BOC). El cobro del IGIC correspondiente a abril se retrasa hasta septiembre y, para compensarlo, el Gobierno recurrirá a una póliza de crédito, aunque sin dejar de aportar lo que le corresponde en ese periodo a los cabildos y ayuntamientos para que no entren en mora.
El presidente regional destacó la relevancia de este programa de medidas y las ya tramitadas por Canarias durante 2020. Según indicó, complementarán las incluidas en el decreto del último Consejo de Ministros de 2020 y paliarán los efectos de las restricciones en todas las Islas, con independencia del nivel de alerta que hayan ido teniendo en cada fase. “Ésta es la propuesta económica más importante que se ha hecho por parte de una comunidad, que también es la más afectada en el turismo, la restauración y el comercio”, apuntó Torres.
El Ejecutivo autonómico pretende que los 165 millones de ayudas directas provengan de los fondos europeos de recuperación React-UE. Para ello, y según explicó Román Rodríguez, se ha propuesto al Gobierno central que, a su vez, plantee ante la UE una reprogramación del destino de parte de esos recursos comunitarios. La propuesta definitiva se presentará antes del 31 de este mes y el Gobierno espera que se apruebe. En caso contrario, se recurrirá a otro crédito extraordinario para afrontar esos 165 millones.
El Gobierno canario resalta las medidas de ayudas estatales, como la flexibilización de los periodos de carencia de los créditos ICO o la prórroga de los ERTES hasta el 31 de mayo. En este sentido, se subraya que dichas ayudas han supuesto en las Islas 4.006 millones en créditos en 2020 y 1.500 en ERTE. No obstante, considera que debía complementarlo con un paquete extra que no afecta a los 8.500 millones del presupuesto regional de 2021 y que, además, se puede ampliar con las aportaciones de cada consejería dentro de sus partidas para este nuevo ejercicio. Unas cuentas regionales de este año que priorizan los derechos básicos y que añaden 646 millones para Sanidad y Educación, lo que ha permitido contratar a unos 7.000 profesionales.
Procedimientos ágiles y objetivos para los hoteles y apartamentos
El plan contempla también que esas ayudas sean complementadas por los cabildos y ayuntamientos, y se baraja la opción de que sean los consistorios los que gestionen la compensación (en el 100% u otros porcentajes a fijar) de cobros como el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), para lo que se debe aún negociar con esas corporaciones. El Ejecutivo autonómico entiende que el IBI es una buena vía de ayuda por tratarse de un recibo objetivo y fácil de comprobar y tramitar, aparte de los cobros de tasas locales como la basura y otras. Asimismo, Torres indicó que se baraja agilizar la gestión de las ayudas con el apoyo de las cámaras de comercio para así lograr la máxima certidumbre y tranquilidad para los empresarios.
El presidente y el vicepresidente insistieron en que se ha trabajado con los distintos sectores y que se pretende alcanzar las vías más objetivas y ágiles para que lleguen las ayudas directas cuanto antes “porque sabemos que debemos estar con los sectores que más se han visto afectados”. “En valores absolutos y relativos, son ayudas por encima de todas las comunidades, pese a que algunas de ellas han estado más dañadas por las restricciones sanitarias, pero las Islas lo necesitan para paliar la peor crisis de nuestra historia”, remarcó Rodríguez.
Torres señaló que se contempla ayudar “a más de 20.000 empresas, entre las que se encuentran 5.423 restaurantes, 1.300 cafeterías y 348 instalaciones deportivas”. El presidente agradeció la predisposición y reuniones mantenidas con los representantes de los subsectores afectados y, como Rodríguez, insistió en que la clave sigue consistiendo en controlar la pandemia con el cumplimiento de las normas y la vacunación.
En este sentido, remarcan el ritmo de administración de las dosis en las Islas, que ha hecho que el Archipiélago lidere las regiones de España en el porcentaje, y logros como que Tenerife y La Gomera sean los únicos lugares del país que redujeron los contactos durante las Navidades tras las restricciones implantadas.
El presidente insistió en que nunca han querido cerrar ningún negocio, sino que se aplican las normas fijadas y tasadas, por lo que concibe este plan extraordinario de ayudas como “un alivio” y vaticina que, gracias a la vacunación, “las cosas irán a mejor”.