El sindicato denuncia que tanto el personal administrativo actual como el profesorado se ven desbordados por la acumulación de trabajo burocrático
Santa Cruz de Tenerife.
ANPE Canarias reclama a la Consejería de Educación que aumente las plantillas de personal administrativo tanto en los centros públicos de las Islas como en los propios servicios centrales de la Administración educativa autonómica.
El sindicato —el más representativo del profesorado de la enseñanza pública no universitaria del Archipiélago— subraya que durante los últimos cursos se han multiplicado las dificultades derivadas de la insuficiente dotación de personal para hacer frente a las obligaciones administrativas del día a día de los centros. En este sentido, señala que la sucesión de leyes educativas con cada cambio de gobierno en el Estado ha contribuido a aumentar las tareas y trámites burocráticos en el ámbito de la enseñanza, que muchas veces son asumidas por los equipos directivos u otros miembros del profesorado por la falta de profesionales administrativos suficientes.
Del mismo modo, ANPE hace hincapié en los problemas que genera la escasez de personal en los servicios centrales de la Consejería de Educación, especialmente en la Dirección General de Personal y Formación del Profesorado, que es la encargada de tramitar los numerosos y, en ocasiones, complejos procedimientos administrativos que atañen a los más de de 27.000 docentes de la enseñanza pública de Canarias.
Por ello, la organización sindical insiste en su requerimiento a la Administración de que todos los centros dispongan al menos de un auxiliar administrativo y se incremente la plantilla en las oficinas centrales. En este sentido, afirma que deben adoptarse medidas estructurales, pero también a corto plazo, con el fin de cubrir puestos que son necesarios y garantizar tanto el correcto funcionamiento de los servicios como la tramitación sin demoras de los procedimientos administrativos en el ámbito educativo.
Para ANPE Canarias, resolver esta carencia permitiría realizar en mejores condiciones su labor tanto al escaso personal administrativo actual, que en muchas ocasiones se ve desbordado por la excesiva acumulación de trabajo, como a los cargos directivos de los centros y al profesorado en general, obligado a llevar a cabo funciones administrativas que no le son propias y que le dificultan centrarse en los procesos de enseñanza y aprendizaje con el alumnado.
