Santa Cruz de Tenerife.- ANPE Canarias insta a la Consejería de Educación a convocar la comisión de seguimiento del acuerdo marco de mejora de plantillas de la enseñanza pública no universitaria firmado el pasado verano por los sindicatos y la propia Administración.
La organización sindical –la más representativa entre el personal docente del Archipiélago– recuerda que en el documento suscrito se establece que la citada comisión debe reunirse, como mínimo, dos veces cada curso escolar y que una de esas reuniones ha de celebrarse en el primer trimestre, por lo que exhorta a la Consejería a no aplazar más su convocatoria.
«El acuerdo marco ha permitido, desde este mismo curso, la incorporación estable de 1.600 docentes y una bajada de las ratios respecto al año previo a la pandemia, pero es necesario que se reúna la comisión de seguimiento para seguir avanzando. Entre las atribuciones de este órgano figuran algunas tan importantes como la interpretación y el desarrollo de los compromisos adquiridos, la evaluación de las medidas aplicadas, la adecuación de los acuerdos a eventuales modificaciones legales y la inclusión de nuevas medidas, así como el estudio de la viabilidad de un calendario plurianual de reducción de las ratios alumnado-docente en todas las etapas, de modo que es fundamental que se convoque cuanto antes», señala Pedro Crespo, presidente de ANPE Canarias.
De cara al nuevo año, el sindicato reclama también una mayor atención a las infraestructuras educativas. En este sentido, se congratula por el aumento de recursos destinados a esta materia en los presupuestos autonómicos del ejercicio 2023, gracias a la llegada de fondos europeos, pero exige una financiación estable por parte del Estado y la puesta en marcha de un verdadero plan de infraestructuras educativas que permita afrontar de una vez problemas como la existencia de centros obsoletos y masificados, el mantenimiento de cubiertas de amianto o la falta de zonas de sombra.
Para ANPE, el proceso de implantación de la nueva ley orgánica de Educación, la LOMLOE, es otra de las asignaturas pendientes de la Administración educativa. La organización sindical recuerda que este curso comenzó sin que se hubiera publicado ninguno de los currículos que tocaba empezar a aplicar y denuncia que aún hoy sigue sin aprobarse buena parte de las normativas necesarias para la implementación de la ley, por lo que, subraya, el profesorado ha tenido que dar clases sin conocer en detalle los contenidos que debía impartir. Dado que el próximo curso entrarán en vigor las modificaciones correspondientes al resto del sistema, ANPE Canarias apremia a la Consejería a aplicarse para garantizar que no vuelva a suceder lo mismo. En todo caso, afirma que continuará dando formación por su cuenta al profesorado sobre la aplicación de la ley, paliando en la medida de lo posible la dejación de funciones de la Consejería en este aspecto.
Otras reivindicaciones
La escasez de personal administrativo en los centros es también objeto de las preocupaciones del sindicato. A su juicio, esta circunstancia se ve agravada por la excesiva burocratización de la enseñanza impuesta por las sucesivas leyes estatales de Educación, que ha obligado al profesorado a realizar multitud de tareas administrativas que poco tienen que ver con su función docente. Ante esta realidad, ANPE exige a la Administración educativa que asegure que este año todos los centros de las Islas dispongan de, al menos, un auxiliar administrativo.
Por otro lado, la organización sindical reclama a la Consejería que modifique su decisión de prohibir que las actividades docentes incluidas dentro del horario de periodicidad no fija, como claustros, reuniones de equipos educativos o sesiones de formación, se desarrollen de manera telemática. Después de pasar por un periodo de emergencia sanitaria en el que se habilitaron multitud de procedimientos online, ANPE Canarias ve incomprensible que se den pasos atrás en ese sentido y solicita al departamento autonómico que revierta de manera inmediata su negativa y que recoja convenientemente esa posibilidad en las instrucciones del próximo curso.