El colectivo defensor de un cambio de política hidráulica en La Palma se solidariza con los agricultores en la protesta que ha convocado la Plataforma por un Precio Justo y Verdadero del Plátano
Los Llanos de Aridane
La Asociación Agua para La Palma apoya «firmemente» las movilizaciones de protesta del sector primario, principalmente el platanero, «por ser nuestro motor económico, creador de nuestra forma de vida, cultura y paisaje, hoy en riesgo de perderse por la incompetencia de los máximos dirigentes tanto de organizaciones privadas como de los responsables públicos».
Este colectivo se suma, por tanto, a la manifestación que ha convocado para el próximo 16 de septiembre a las 11: 00 horas frente al Cabildo palmero la Plataforma por un Precio Justo y Verdadero del Plátano, en protesta por los elevados costes de producción y los bajísimos precios de retorno para los agricultores, y en demanda de que se aplique al plátano canario la Ley de Cadena Alimentaria.
A juicio de Agua para La Palma, «lejos de dar una gestión seria y profesional queproporcionara al plátano y al resto de la agricultura una rentabilidad, los responsables de esta situación se han dedicado a una gestión basada en subvenciones y economía de salón que los condenan a la desaparición». «Son los mismos», expone la asociación, «que niegan a los demás lo que se otorgan a sí mismos, al estar en contra de la Ley de Cadena Alimentaria para mantener el actual sistema, mediante el cual se quedan obligatoriamente un porcentaje en el precio de venta, que les asegura seguir cobrando sus generosos sueldos, sin importarles dejar a quienes de verdad invierten y arriesgan su tiempo, esfuerzo y dinero, con pérdidas o unas pocas migajas».
Agua para La Palma anima a participar en la manifestación del próximo día 16 en Santa Cruz de La Palma porque «está en nuestras manos que no se pierda el patrimonio creado por generaciones de quienes cultivaron dignamente la tierra, llave además de poder hablar de soberanía alimentaria».
Una soberanía, añade, «que vemos cada día peligra por oscuros y poderosos intereses apoyados por nuestro silencio cómplice, con el que permitimos poner la producción de nuestros alimentos en manos de multinacionales, que primero hunden los precios para hacer desaparecer muchos productores locales y después elevan los precios hasta niveles muchos más caros que al principio, pero ahora en beneficio de unos pocos».
Desde el punto de vista de la asociación, la crisis que atraviesa el sector primario, «muestra claramente la gran mentira que pagamos con nuestros impuestos en el REA (Régimen Específico de Abastecimiento de Canarias), pero que nos han dado como fruto la cesta de la compra más cara de España, agravada por la doble insularidad de las islas menores».
Para la asociación, «los numerosos discursos y notas de prensa en que los responsables públicos anuncian buenas intenciones y proyectos sobre soberanía alimentaria y cambio climático son brindis al sol y papel mojado si no van acompañadas de soluciones reales a toda esta problemática».